Cuando te sientas inquieto en el trabajo, o en casa, y cuando vayas a cualquier ocasión a la cual no quieras asistir (y tengas que ir por compromiso obligatorio, o algo así), carga o viste una cornalina de color naranja. Pero antes, esto es lo que debes hacer con la piedra: Instrucciones previas: Limpia la piedra con agua de primavera, agua de luna llena o agua consagrada, déjala en tu altar y enciende una varita de incienso y una vela consagrada. Siéntate confortablemente y medita con tus ojos cerrados por 15 minutos a media hora. Abre tus ojos y dirige pensamientos positivos y saludables a la cornalina, pidiendo su asistencia para dejarte fuera de las dificultades o momentos desagradables — ya sea en lo físico, mental o emocional. Cuando estés listo, recoge la piedra y úsala de inmediato. Llévala contigo a todos lados ese día.
Con sus vibraciones, la cornalina también ayuda a mejorar la motivación para aquellos que son propensos a la fatiga. Aquellos que meditan regularmente encontrarán que esta piedra despeja la mente de pensamientos extraños, y realza el progreso saludable.
Al mismo tiempo, la cornalina naranja posee una fuerza sutil para guiar que fortalece a su vez la habilidad para librar los retos de la vida.
Por: S.Y. Zenith