La gente gasta una fortuna en varitas de fantasía, pero la varita más mágica es la que haces tú mismo.
Selecciona de antemano un pedazo de madera que se sienta bien en tu mano. La madera puede ser manzano para la magia, sauce para el amor, roble para la protección, o lo que prefieras.
Enraízate y céntrate antes de comenzar. Este es un acto ritual.
Talla tu nombre en la madera con un alfabeto mágico, como el rúnico o Theban. Añade otros símbolos, como espirales, pentagramas o signos astrológicos.
Para incrustar un cristal en la varita, talla una sangría. Lija la varita tallada hasta que esté lisa, luego pega los cristales u otros adornos en su lugar. Luego impregna toda la varita con aceite de linaza.
Finalmente, envuelve la varita con tiras de cuero para hacer una empuñadura. Puedes dejar que los extremos de estas tiras colgando y adornarlos con cuentas o plumas.
Consagra la herramienta por aire, fuego, agua y tierra. Úsala inmediatamente.
Escrito por su autora, Deborah Lipp
Traducido por Templo Dragón
Publicado por Llewellyn Worldwide Ltd. ® ™ ©