Ancestralmente se sabe que la naturaleza de nuestro Útero, la Luna y la Madre Tierra son las mismas, son cíclicas.
Si una Mujer hace conciencia de este conocimiento, es suficiente para tener acceso a un poder ilimitado.
Pero no hablamos del poder para dominar al mundo o someter a otros a su voluntad.
Más bien hablamos del poder para ser soberana de ella misma.
Hablamos del poder para gestar y parir su propia realidad, porque amorosa acepta el flujo natural de su ciclicidad.
El ciclo de la siembra, para enfocar una visión. (Menstruación-Luna Nueva-Invierno)
El ciclo de la maduración, para aterrizar esa visión. (Pre Ovulación-Luna Creciente-Primavera)
El ciclo de la cosecha, para recoger y celebrar los logros. (Ovulación-Luna Llena-Verano)
El ciclo de la recapitulación, para asentar lo experimentado y prepararse para una nueva siembra. (Pre Menstruación-Luna Menguante-Otoño)
Y así infinitamente hasta el final de los tiempos...
El día que cada Mujer comprenda desde su corazón esta sabiduría, comenzará a ser paciente y amorosa con ella misma.
Porque la naturaleza nunca se equivoca, ser Mujer es la forma exquisitamente humana, en que los ciclos de la vida se evidencian.
Sabiduría Femenina