Los nativos de las Indias Occidentales solían colocar plantas de piña como una valla protectora alrededor de sus aldeas. Esas hojas pueden ser bastante afiladas, por lo que sirven como una gran barrera natural para los depredadores. Es muy fácil obtener un comienzo para tu propia planta, simplemente necesitas comprar una planta de piña madura en la tienda de comestibles. Asegúrate de que todavía tenga las hojas adjuntas.
Simplemente corta las hojas o la corona de la parte superior de la planta de piña, eliminando cualquier fruta que aún pueda estar unida a la base de las hojas. Coloca los palillos de dientes alrededor del borde exterior de la corona de piña, cerca de la base, y coloca en un vaso pequeño de agua hasta que eche raíces. (Los palillos de dientes evitan que la vegetación caiga hasta el vidrio, donde se asentará y se pudrirá.) Después de que haya pequeñas raíces, simplemente planta la corona de piña en una maceta y déjala en un lugar soleado. Yo recomendaría usar una maceta amarilla u oro para aumentar el factor de protección. También necesitarás un poco de tierra para macetas, algo de grava para el drenaje, y tal vez una gema protectora adecuada, tal vez hematita.
Escrito por su autora, Estha McNevin
Traducido y adaptado por Templo Dragón
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