Ahora es el tiempo perfecto para que hagas tu propia limpia de primavera, tanto física como espiritual.
Mientras barres, aspiras y sacudes, imagina que remueves cualquier negatividad que se haya generado junto con la suciedad y el polvo.
Cuando hayas terminado, coloca un mantel blanco en una mesa o mueblo cerca del corazón (centro) de tu casa y coloca ahí una campana, incienso de salvia o cedro, un encendedor, sal, un cáliz o copa llena de agua, y algo para revolver.
Coloca cerca una nueva escoba, después usa la escoba simbólicamente para barrer la casa, empieza por los cuartos del final de tu casa, siempre yendo hacia la puerta.
Abre la puerta y barre toda la negatividad que hayas juntado y sácala, diciendo:
Yo barro hacia fuera lo viejo y lo junto en lo nuevo
Cierra la puerta y regresa al altar. Enciende el incienso, diciendo:
Por el aire y el fuego, yo limpio y bendigo mi casa. Que sea un lugar de sabiduría y amor
Dirígete alrededor de la casa en círculos como las manecillas del reloj, humeando, asegurándote de que el humo llega a cada rincón.
Finalmente, vacía tres cucharadas de sal al agua y revuélvelo, diciendo:
Por el agua y la tierra, yo limpio y bendigo mi casa. Que sea un lugar santo de curación.
Repite los círculos como las manecillas del reloj, cargando el cáliz de agua salada del cual iras rociando cuidadosamente.
Regresa al altar y pide por las bendiciones de tu deidad patrona.
Por mi voluntad y con sus bendiciones, este ritual está hecho
Haz sonar la campana.
Por: Lady MoonDance