En muchos lugares, el verano es un tiempo típico que la gente usa para hacer una peregrinación a las aguas sagradas buscando la sanación. Incluso si tú no tienes un pozo sagrado o río cerca, todavía puedes hacer este hechizo. Cualquier lugar con agua funcionará, incluso un patio o una fuente de interior. Si es necesario, utiliza un tazón de agua (déjalo fuera bajo una luna llena para un golpe extra de poder). Salpica un poco de agua en tu cabeza, corazón y abdomen, y di algo como:
Aguas curativas,
regalo de los Dioses,
lavad la enfermedad y la dolencia,
lavad el dolor y el desequilibrio,
lavad la preocupación y la tristeza,
purificadme y curadme,
purificad mi mente, corazón y cuerpo,
y sanadme aguas sagradas.
Que así sea.
Escrito por su autora, Deborah Blake
Traducido por Templo Dragón
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