En esta época del año en la que a menudo nos damos obsequios, no te olvides de la vida salvaje, especialmente si la nieve cubre gran parte del suelo.
Si tienes piñas en el lugar donde vives, junta algunas y adquiere un poco de miel y alpiste. Coloca un alambre o una cuerda resistente en la piña para que puedas manipularla y colgarla. Unta muy bien la piña en miel y luego generosamente reparte sobre ella las semillas, luego déjala reposar. Di:
Un regalo de mi parte para todos,
que puedas encontrarlo a través del invierno.
Ahora saca la piña afuera y pégala a una cerca, poste o rama de un árbol para que los pájaros y otras criaturas disfruten de la golosina. Reponer según sea necesario.
Escrito por JAMES KAMBOS
Traducido y adaptado por Templo Dragón
Publicado por Llewellyn Worldwide Ltd. ® ™ ©