El SelfCare o auto cuidado en inglés, es algo vital para una bruja. Y no hablamos de las protecciones, cosa escencial para tener en cuenta, sino más bien de una rutina que nos mantengan con buena energía para afrontar el día día y el oficio en si mismo. Por eso voy a tirarles algunos tips a tener en consideración:
- Limpia regularmente tus espacios: si, este ítem es muy recurrente en mis recomendaciones, pero suelen olvidarlo. Hay que barrer, trapear y limpiar energéticamente los espacios con regularidad. Una vez a la semana está bien.
- Medita: y lo digo en sentido amplio. Practica dejar la mente en blanco, practica la visualización, practica el descanso y aprende a cómo estimular tu concentración. Es sumamente necesario al momento de emprender cualquier ritual.
- Cuida tu alimentación: muchísimos rituales exigen incluso periodos de ayuno. Mantener una dieta saludable favorece la absorción de las propiedades de las hierbas que utilizamos. Bebe mucha agua, evita los procesados y los refinados.
- Utiliza tus conocimientos en herbolaria: ¿Hace falta que diga que debes sanarte a ti misma con tus hierbas? Eso deberías hacerlo hace mucho. Enfocarse en una misma y su propia salud es vital.
- Alimenta tu intuición: no descuides lo que tu cuerpo te anuncia. Hazle caso, escúchalo! En cuanto más atenta estés a tí misma, más fácil será entender lo que te rodea incluso mejor que un oráculo. Si tu cuerpo te dice que algo no está bien, definitivamente no lo está.
- Cuida tu círculo de personas: muchas brujas son muy sensibles a las emociones ajenas. Evita contarminarte con pensamientos que no son tuyos. Sobre todo negativos. ¿Quién necesita las quejas de alguien más?
- Anota tus sueños: igual que la intuición, lleva un diario junto a la cama, anotalo todo!
- Integra el Oficio a tu vida diaria: la práctica hace a la bruja. Hechiza tus tés de la mañana, enciende una vela mientras cocinas, elije un día de la semana para completar y actualizar tu grimorio. La brujería NO es leer.
Autor Desconocido