Que tus manos vayan limpias, para que puedan crear cosas hermosas.
Que tus pies vayan limpios para que puedan llevarte a donde necesitas estar.
Que tu corazón vaya limpio, para que puedas escuchar sus mensajes claramente.
Que tú garganta vaya limpia, para que digas palabras justas cuando se necesita.
Que tus ojos vayan limpios, para que puedas ver las señales y maravillas de este mundo.
Que esta persona y espacio vayan limpios por el humo de estas fragantes plantas.
Y que ese mismo humo, lleve nuestras oraciones, como una espiral hacia los cielos.
Juan Phoenix.