De vez en cuando podemos sentir la necesidad de reforzar nuestras barreras, nuestros límites, nuestros escudos. Este hechizo se basa en la magia popular italiana, y en tres ingredientes simples que se encuentran en muchos hogares: limón, clavo de olor y sal.
Primeramente, procura enraizar tu energía, céntrate y alinea tu energía. Ve a la cocina o un espacio de trabajo que sea parte de tu vida cotidiana en el hogar. Toma el limón amarillo brillante, que tiene asociaciones solares, sostenlo debajo de tu nariz, y comienza a respirar profunda, fuerte y conscientemente, creando un aliento potenciado por la Madre Tierra y todos los mundos de abajo. Respira siete veces sobre el limón y visualízalo brillando; trata incluso de escuchar un zumbido. Cuando estés listo: Empuja trece clavos de olor dentro del limón, clávalos hasta donde se pueda, pausadamente, toma tu tiempo, cada vez que insertes un clavo de olor concéntrate poderosamente en reforzar (y sentir) que tanto tú como tu hogar estáis siendo revitalizados, protegidos, guardados a salvo, limpiados, energetizados. Tú, tu casa, tu familia, tus mascotas, tus plantas, tus pertenencias, tus vehículos, los alrededores. Finalmente, pon el hechizo de limón y clavo en un recipiente (plato o contenedor) que contenga sal de mar, y hazlo con propósito y poder. Déjalo ahí varios días. Así sea. Está Hecho.
Escrito por Gede Parma