El estrés puede producir sueños desagradables e interrumpir el sueño.
La lavanda es calmante y puede ayudar a prolongar el sueño y aliviar los pensamientos estresantes que pueden conducir a pesadillas. Coloca un tazón de agua salada debajo de tu cama, y antes de ir a la cama, coloca unas gotas de lavanda en la superficie del agua (hacer esto cada noche hasta que los sueños mejoren). Además, antes de dormir, piensa en los eventos del día en orden inverso. Esto puede ayudar a difundir el estrés mental, que a veces puede causar pesadillas que ocurren como el cerebro intenta resolver problemas durante el sueño. Es posible que no encuentres respuestas o soluciones inmediatas, pero a veces las ideas pueden llegar en sueños. Trata de no obsesionarse con nada.
Respira profundamente y brevemente tensa y libera cada conjunto de músculos, de la cabeza a los pies.
Agradece cada cosa que viviste el día de hoy,
Escrito por PEG ALOI