El Sol se asocia con todas las deidades solares, honradas desde el comienzo del tiempo humano. Está a 93 millones de millas de distancia, sin embargo, es innegable que se siente y se depende de su presencia. Marcamos nuestros días y años con el Sol, algunas personas incluso eligen llamar a sus cumpleaños "retornos solares". Innumerables civilizaciones han tenido rituales, ritos y creencias que encarnan y honran al Sol. El Sol es autosuficiente y ferozmente independiente. Su luz ilumina los rincones más oscuros y ahuyenta las sombras.
Hoy, en honor al Sol, unge una vela amarilla con aceite de oliva y espolvoréala con purpurina dorada. Coloca la vela en un soporte ignífugo y enciéndela.
Contempla la llama de la vela y reflexiona sobre la poderosa luz del Sol. Piensa en cómo la luz del Sol entra y sobre la oscuridad del espacio, iluminando nuestro mundo con gracia.
Deja que tu vela se consuma de forma segura o apaga la llama al terminar.
Escrito por NAJAH LIGHTFOOT
Traducido y adaptado por Templo Dragón
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