Hécate te celebro, protectora de los caminos, en las encrucijadas, agradable, celeste, ctonia y marina, de azafranado peplo, sepulcral, que entra en frenesí con las almas de los muertos; hija de Perses , amante de la soledad, que se regocija con los ciervos, nocturna protectora de perros, acompañada de ruidos animales, desceñida, de aspecto irresistible; señora de los toros, guardiana de las llaves de todo el universo; guía,ninfa, nodriza de jóvenes, que habita en los montes. Suplicando a la doncella que se haga presente en las sagradas iniciaciones, siempre propicia para el boyero de alegre corazón.
Himno Órfico