Los pies tiene unos puntos por donde la energía asciende al resto del cuerpo. Si necesitas recuperar la fuerza, limpiar de energías negativas tu aura y tu cuerpo y poner la mente en positivo, esta receta es muy sencilla de hacer y muy eficaz. Sobre todo si tienes que alguna gestión especial con la que enfrentarte o te espera un momento comprometido y quieres triunfar en el, este pequeño ritual te llevará, teniendo a mano los materiales, apenas unos minutos.
En un recipiente colocas cantos rodados de las orillas de una playa o de un río, las cubres con agua a la que se le mezcla unas gotas de esencia de rosas y si puedes, añade unos pétalos de rosa, o unas rosas bordeando los cantos rodados. Siéntate en una silla donde puedas estar muy cómoda y recostarte.
Apoya los pies sobre las piedras y muévelos como si patinaras, suavemente, y desacompasados, es decir cuando uno va hacia delante el otro va hacia atrás. Cierra los ojos y visualiza como a través de la planta de los pies por tus piernas por tus caderas, por todo tu cuerpo hasta la parte superior de la cabeza, te recorre cintas de energía, como canales que se abre por todo tu cuerpo.
En pocos segundos te sentirás invadida por una sensación de paz, armonía y fuerza. Ya he contado alguna vez que los cantos rodados, para tomar esa forma, han tenido que estar en contacto con los cuatro elementos de la naturaleza durante muchos tiempo, cargándose de la fuerza. Y esa fuerza te la transmitirá en ese pequeño ritual.
Los cantos rodados yo los tengo en un bote de cristal en mi cuarto de baño, la esencia de rosas no debería faltar nunca por que es una de las esencias que usadas en la ducha o en el baño, te envuelve y le da a tu piel una vibración muy atractiva.
A Cova da Meiga