Desde tiempos milenarios las religiones han utilizado aceites perfumados consagrados para sus rituales.
El aceite Santo significa la quinta esencia, el akasha, la presencia divina. No es algo para gastarse a la ligera. No es para utilizarse en riegos o lavasuelos. No es para desperdiciarse o para ungirse a cada rato. Se puede emplear para vestir velas, para consagrar herramientas mágicas, para ungirte al iniciar un ritual, para ungir a alguien que necesite protección, para ungir la puerta de una casa o un negocio, para bendecir tu billetera, para sellar una limpia energética.
El Aceite Santo tú lo puedes elaborar escogiendo 4 elementos:
Una esencia cuyo aroma te recuerde a Dios
Una esencia que te recuerde a la Diosa
Una esencia que te recuerde al Amor
Una aceite base, puede ser aceite de almendras dulces o aceite de oliva virgen.
Todo a partes iguales, Ojo: así obtendrás un aceite perfumado.
Falta la consagración que es la siguiente:
Yo te consagro aceite esencial, pues purificado y limpio estarás
porque dentro del círculo tú me servirás.
El Dios y la Diosa así lo han decretado,
por eso ahora quedas consagrado.
Por los Antiguos, la Diosa y el Dios, estás consagrado
con las virtudes y energías del sol, la luna y las estrellas, te baño.
por los poderes del fuego, el aire, el agua y la tierra, te cargo
y que a través tuyo obtenga todo lo que he deseado.
Dioses antiguos, carguen este aceite con sus poderes sagrados.
Aceite esencial de Abeto.
Tanto como si es de Abeto como si es de Pino, como en general de cualquier conífera, tiene el poder de propiciar la fecundidad y la fortuna, por el hecho de ser sempervirente. El aceite esencial puede servir para reforzar una petición o para purificar a una persona durante los ritos de la negatividad que le rodea.
Aceite esencial de Acacia.
El aceite esencial de acacia se emplea en los rituales en los que se intenta aumentar las propias vibraciones espirituales o las de otra persona, para favorecer la espiritualidad, la elevación inferior, la clarividencia.
También se utiliza en los rituales de purificación, para alejar las negatividades.
Aceite esencial de Albahaca.
Es un agente poderoso contra cualquier forma de pobreza, moral, espiritual, intelectual y económica. Se emplea en los rituales que favorecen el amor por uno mismo y por el prójimo, que traen fortuna y dinero, y que infunden el valor necesario para proseguir por el camino de la búsqueda espiritual.
Aceite esencial de Anís.
Esta planta tiene el poder de alejar las pesadillas y devolver la serenidad perdida. Por tanto, el aceite esencial es usado en rituales para reducir la ansiedad y el estrés, así como para recuperar la calma.
Aceite esencial de Artemisa.
Se utiliza en los rituales de protección contra las desgracias, por ejemplo si algún ser querido está de viaje y no queremos que lee suceda nada malo, pero también en los rituales para proteger la fidelidad y la felicidad conyugales y para alejar la indiferencia del compañero.
Aceite esencial de Clavo.
Aumenta la potencia sexual masculina y el deseo femenino, y por ello se utiliza en los rituales para encontrar la pasión perdida y para volver a unir parejas en crisis, en las que la atracción sexual ha pasado o se ha debilitado.
Aceite esencial de Eneldo.
El aceite extraído de las semillas de eneldo sirve para propiciar ingresos lícitos de dinero, por lo que puede ser utilizado en los rituales para obtener un aumento de sueldo, así como un modo de protección contra accidentes y las desgracias en el campo financiero, por ejemplo para prevenir o limitar los daños a una inversión errónea.
Aceite esencial de Espino Albar.
Infunde esperanza y, por tanto, se usa en ritos de fertilidad y prosperidad, cuando se intenta encontrar la solución positiva de un problema, o para alejar momentos de abatimiento y depresión. También se aplica para evocar a las hadas, ya que se sabe que estos seres habitan en los arbustos de espino albar.
Aceite esencial de Eucalipto.
Se usa en los rituales para reforzar el corazón y ayudar a alguien en un momento muy triste, por ejemplo a finales de una relación, en caso de divorcio o de pérdida grave, como un luto.
Aceite esencial de Geranio.
Se usa en los rituales para alejar a alguien de un periodo triste de depresión o abatimiento, porque infunde valor y ganas de vivir.
Aceite esencial de Hipérico.
Usado en los rituales de purificación, es útil para alejar a los espíritus malignos y para proteger al oficiante en caso de peligros ocultos.
Aceite esencial de Jazmín.
Usado particularmente en rituales de evocación de los espíritus elementales y como ofrenda a las hadas, es muy precioso y muy poderoso, por lo que es bueno abusar de él.
Aceite esencial de Laurel.
Este aceite esencial protege de las negatividades, de la envidia y del mal de ojo. Por tanto, es útil para la purificación antes de los rituales, a los que confiere fuerza. Se emplea para eliminar la negatividad en el trabajo.
Aceite esencial de Lavanda.
Se usa en los rituales de purificación para alejar negatividades, desgracias y mal humor. Además, favorece la felicidad, el amor, el alcance de paz y suele usarse junto con otros aceites para aumentar su eficacia.
Aceite esencial de Madreselva.
Es muy apreciado, y resulta conveniente usarlo en rituales de evocación. Además, se usa en los rituales de unión de parejas con problemas o para encontrar un alma gemela.
Aceite esencial de Manzana.
La manzana recoge en su interior una estrella de cinco puntas formada por las semillas, por lo que representa la libertad y el conocimiento que nos vuelve libres. El aceite esencial de manzana es muy potente, si se usa en los rituales de autoconciencia, para expandir la propia comprensión de las cosas ocultas.
Aceite esencial de Manzanilla.
Aumenta la resistencia al dolor y es útil en los rituales que se llevan a cabo antes de una operación quirúrgica, una visita al dentista o un examen médico que puede generar dolor físico. Se usa también en los rituales de prosperidad, porque las flores amarillas recuerdan el color del oro y para reforzar la acción de otras esencias. Por último, puede emplearse en los rituales de alejamiento del mal humor y del estrés, incluso para recuperar la calma.
Aceite esencial de Melisa.
Es muy útil en todos los rituales de amor. Se usa también para favorecer la amistad y la apertura hacia el prójimo.
Aceite esencial de Menta.
Favorece la disponibilidad al diálogo y la apertura hacia el amor de una sola persona o de toda la humanidad. Se utiliza en los rituales para apaciguar conflictos y litigios, para acercar a parejas en crisis y para “ablandar” las resistencias de un adversario.
Aceite esencial de Muguete.
Puede ser utilizado en rituales para sondear las profundidades de la propia mente por su capacidad de llevar a la conciencia los contenidos del inconsciente y nuestras pulsiones.
Aceite esencial de Musgo.
Se usa en los rituales para reforzar el propio poder de seducción y para atraer sobre uno mismo, o sobre la persona para la que se realiza el rito, la benevolencia y la amistad. Es muy potente y sirve para reforzar casi todas las magias.
Aceite esencial de romero.
Se emplea en los rituales para protegerse o proteger a los demás de la negatividad, para anular maldiciones y maleficios, para atraer benevolencia y amor hacia uno mismo o hacia la persona para la que se realiza el rito.
Aceite esencial de Rosa.
Tiene múltiples usos, debido a la importancia de la flor de la que es extraído. Por ejemplo, se utiliza en los rituales para potenciar la creatividad, en el caso de que alguien haya perdido la inspiración y no consiga llevar a cabo un trabajo de tipo artístico. Por ejemplo, en los rituales para propiciar los sueños proféticos, que pueden revelarnos algo fundamental para nuestro futuro; y por último, en todos los rituales para atraer el amor, la amistad y la benevolencia del prójimo.
Aceite esencial de Salvia.
Es un ingrediente fundamental en los rituales de curación, sobre todo si la persona para la que se lleva a cabo el rito ha salido indemne de un grave peligro que aún le acecha. Protege y purifica, alejando las enfermedades y los accidentes.
Aceite esencial de Vainilla.
Se usa para ayudar a superar momentos difíciles e incomprensiones, para calmar la rabia y la irritabilidad, y para aportar paz y serenidad entre dos personas. Aumenta también el interés en los conflictos de nuestra vida y de quienes nos rodean.
Aceite esencial de Verbena.
Se utiliza en los rituales de amor y para alejar el cansancio existencial.
Fuente de las definiciones: La magia Wicca, de C. Wallace. Ed.: De Vecchi.